lunes, 31 de enero de 2011

Bruno Nievas - Realidad aumentada

Almería. (EUROPA PRESS). - El pediatra y escritor almeriense Bruno Nievas ha decidido ofrecer de forma gratuita en internet su novela 'Realidad Aumentada' que ya ha alcanzado más de 20.000 descargas en 25 días, según ha informado a Europa Press el propio autor, que decidió 'colgar' la obra en la red al no encontrar una editorial que quisiera publicarla.

Nievas ha asegurado que está "tan sorprendido como encantado" con que esta iniciativa haya tenido un número tan alto de descargas en la red, así como con el hecho de que más de 700 internautas se hayan hecho seguidores de la página de la obra en la red social Facebook. 'Realidad Aumentada' es un thriller con tintes de ciencia ficción, que ha recibido "unas cuantas críticas positivas", otro de los aspectos que motivó al autor a 'subirlo' a internet.

Entre ellas la del director de 'Negro sobre Blanco, Richard Sabogal, que ha dicho de la obra que la "fina pluma" del autor deja "un final que rompe los paradigmas y satisface más de un paladar exigente". Por su parte, Juan Gómez-Jurado, VII Premio de Novela Ciudad de Torrevieja con 'El emblema del traidor' y que ha vendido más de tres millones de ejemplares de sus novelas, ha destacado que 'Realidad Aumentada' es "un viaje salvaje a los confines de la tecnología y de la mente, narrado con el pulso de un escritor que dará mucho que hablar".

La obra puede descargarse de forma gratuita, en versión PDF o EPUB, para dispositivos Iphone o Ipad, entre otros, en la pagina web www.realidadaumentadalanovela.com

sábado, 29 de enero de 2011

Alfonso Mateo Sagasta

Ideal, 29/01/2011

Alfonso Mateo-Sagasta ha ganado el premio de Novela de CajaGranada por la obra 'Caminarás con el sol'. La obra se presentó bajo el pseudónimo de Víctor Meller, y ha sido elegida de entre 278 textos.
Alfonso Mateo-Sagasta nació en Madrid en 1960, es licenciado en Geografía e Historia, especialidad de Historia Antigua y Medieval. Es autor de cuatro novelas: El olor de las especias (2002); Ladrones de tinta (2004), ganadora del I Premio Internacional de Novela Histórica Ciudad de Zaragoza y del I Premio Espartaco a la mejor novela histórica editada en español, concedido por la Asociación Semana Negra; El gabinete de las maravillas (2006), que volvió a obtener el Premio Espartaco en el año 2007: y de la que Mateo-Sagas explica que se trata de "una novela policiaca que se desarrolla en el siglo XVII español" y en la que el protagonista es de nuevo Isidoro Montenegros, que nació en 'Los ladrones de tinta' y que ahora, según el escritor, "ya no investiga un asunto literario sino un verdadero crimen".
La última, Las caras del tigre, trata de una técnica de una compañía de seguros encuentra restos de un ADN desconocido en un trágico accidente entre un autobús de pasajeros y un camión cisterna. En el año 2005 publicó Las flores de otoño, colección de artículos que componen una guía de lectura de varias obras del Siglo de Oro.
Sus obras pertenecen al género de la novela histórica de ficción, con una narrativa minuciosa y realista, y con tramas en las que en ocasiones aparece la intriga.
Con el premio de Novela Histórica de CajaGranada, Alfonso Mateo-Sagasta consolida una carrera brillante en la narrativa nacional.

miércoles, 26 de enero de 2011

Antonio Gómez Rufo


El MUNDO - 25/01/2011

TRIBUNA: POLÍTICA Y SOCIEDAD
En el 25 aniversario de su muerte, el autor recuerda al ex alcalde de Madrid y reivindica su ideario progresista. Lamenta que los dirigentes actuales traten de lavar el cerebro de los ciudadanos tratándolos como si fueran niños
Querido profesor: Hay ocasiones en que el tiempo se esfuerza en lavar la añoranza, pero el alma sigue herida. Además este año también se ha ido Berlanga allá a donde los espíritus geniales tengan reservada morada, y su marcha tampoco ha ayudado al sosiego. Con tanta orfandad, se abren grietas por las que se cuela la tristeza; por eso en esta ocasión le escribo desde el desconsuelo y también desde la indignación, y sin el ánimo festivo que usted supo transmitir a cuantos compartimos años de aprendizaje, valores éticos y compromiso con unos ideales que siguen vigentes y, en mi opinión, más necesarios incluso que cuando los invocábamos y reclamábamos.
Puede que la indignación sea pócima que avive la lucidez, o alimente el pesimismo, pero lo cierto es que estoy persuadido de que han pesado 25 años desde que usted puso fin al viaje de la vida y el mundo no es mejor que cuando lo dejó. Ha bastado un cuarto de siglo para que apenas lo reconozcamos. Aquellos sueños de una sociedad justa, libre, solidaria y en armonía con el medio que nos alimentaba no sólo no se han cumplido sino que nos hemos empeñado en edificar un modelo de sociedad cada vez más injusto e insolidario, y menos libre. Cuando usted dejó escrito en Europa o el fin de la utopía que «si no pensamos por delante, si no avanzamos, vamos a caer en la necedad de pensar que las ideas superiores no sirven en momentos de crisis», acertó de plano, pero nadie atendió a la advertencia. Y el resultado de este deterioro de la libertad y fuga de la sensatez ha conducido a un modelo de sociedad defendido por igual por los gobiernos conservadores y progresistas, ambos rendidos ante un pragmatismo desideologizado y ante el que los individuos carecemos de más salida que la resignación. O la sumisión. ¿Recuerda El perseguidor, de Julio Cortázar, refiriéndose a Johnny, el saxofonista, cuando decía aquello de «Me siento como un hueco a su lado»? Por desgracia, ahora, con respecto a esta sociedad, todos somos un hueco.
No son sólo la gran crisis económica provocada por la avaricia del dinero, la amenaza del terrorismo internacional y el cambio climático que está destruyendo este hogar compartido que es la Tierra los que exigen un replanteamiento global y un principio de rectificación. Es que, considerados ciudadano a ciudadano, parece haberse pactado una conjura para que todos estemos inmovilizados por el miedo. Cabe pensar, don Enrique, que el culto al miedo ha sustituido a las viejas creencias religiosas en la intimidad del ser humano. De hecho, uno de cada dos anuncios publicitarios aconseja adquirir milagros para preservar la salud, conservar una apariencia jovial o comprar un nicho de seguridad. Además, las leyes que se promulgan, en lugar de liberar a los ciudadanos, han erigido un Estado-padre que considera menores de edad a sus súbditos, y la gestión de los gobiernos tiene una deliberada finalidad económica de cuadrar las cuentas públicas, al dictado del mercado, y así intentar ganar las siguientes elecciones. No se plantean soluciones de futuro ni se piensa por delante porque los gobernantes se conforman con salidas fáciles hasta los siguientes comicios. No se asombre, profesor: si me pregunta quiénes nos gobiernan, responderé que gente joven de partido que no se relaciona con la sociedad, sólo se aplauden entre ellos en las madrigueras de su organización, así que no es de extrañar que sumen a la ignorancia la ambición, y a la ambición, la complacencia.
No le gustaría el camino por el que transitamos, profesor. Ni tampoco la meta que se vislumbra en el horizonte. Todo aquello en lo que creíamos ha dejado de importar y la jerarquía de valores que defendíamos se ha desmoronado cual castillo de naipes. La realidad de 2011, un cuarto de siglo después, es que no se impide la injusta acumulación de riqueza en unas pocas manos mientras, para distraer, se dictan leyes y más leyes que no figuraban en los programas electorales, convencidos de que aquellos votos autorizan después a decidir cualquier cosa en nombre de los ciudadanos. ¿Sabe que ahora, entre otras muchas cosas, se prohíbe despachar una botella de cava después de las 10 de la noche, vender un antibiótico sin receta y fumar? Además se puede castigar con penas de cárcel por conducir deprisa, se dificulta educar a los hijos en el idioma español en Cataluña, se cuestiona el derecho a remunerar una creación artística, se impide conducir sin cinturón de seguridad y viajar en avión con un frasco de colonia. Niegan la idea de que los ciudadanos son mayores de edad y para ello articulan un burdo sistema propagandístico de lavado de cerebro y sancionan cualquier actitud diferente a la resignación.
Por el contrario, y aunque le cueste trabajo creerlo, profesor, se puede vender alimentos adulterados y pescado con mercurio, especular con el suelo y la vivienda, explotar a los jóvenes con contratos temporales sin horario, con salarios indignos y sin garantías laborales… Se sabe que el suicidio es la primera causa de muerte en menores de 35 años en España, sin que la responsabilidad de la escuela, las empresas y la sociedad se contemple, y se autoriza la contaminación urbana, la desertización, el envenenamiento de ríos y la destrucción del planeta con emisiones de CO2. En definitiva, se decide que cualquier actividad humana debe ser regulada y sancionable mientras otras se desatienden interesadamente.
Esta es, vista desde la indignación y el desconsuelo, la situación 25 años después de haberse marchado, profesor. Somos un hueco, como le decía, y los ciudadanos (asombrados o atemorizados) alzamos los hombros y nos conformamos. Aquel espíritu inconformista que surge de la reflexión serena, aquellas ideologías, al igual que la reivindicación de ser tratados como seres humanos con los derechos y deberes nacidos en la Revolución Francesa, han dado paso a un mundo temeroso y hostil en el que el deber primordial no es ayudar al vecino sino denunciarlo a la menor sospecha, jaleándose por los gobiernos la delación y acercándonos a aquel infierno que Orwell describió en su novela 1984. Ah, lo olvidaba: Montesquieu ha muerto. Los poderes Ejecutivo y Legislativo pertenecen, aunque lo nieguen, al mismo patrón, y el Judicial ha de sancionar sus decisiones o ser acusado de injerencia política.
Don Enrique: ¿a dónde fueron a parar los sueños? ¿Adónde aquellas utopías que nos mostraban el camino porque sabíamos que eran planteamientos imposibles en el momento de su formulación, pero realizables quizás algún día? Tal vez fueron enterradas con su generación, profesor, porque de aquellas pretensiones apenas queda una protesta marginal que a poco o nada conduce.
La indignación se acrecienta cuando se comprueba cuán pocos son quienes se alzan en rebeldía o siquiera añoran un punto de referencia intelectual para intentar reconducir el orden de las cosas. De aquellos que nos ilustraban, Lang, Bobbio, Senghor o usted mismo, quedan pocos y se les ignora. Los intelectuales fueron sustituidos por algunos políticos con una cierta concepción del Estado, pero también fueron reemplazados y ya no quedó nada. Se mire hacia donde se mire, profesor, hace mucho frío.
Recordarle en un día como hoy es un privilegio; un pequeño lujo que todavía podemos disfrutar. Leer sus Obras Completas, de las que ya se han publicado cinco tomos, un aprendizaje impagable. Y pensar que España fue un país en el que tuvieron cabida maestros como usted, una llamada a la nostalgia. Hoy se acuña el pensamiento barojiano de que «la mitad de los problemas de España se resolverían si todos nos estuviéramos tres meses callados», y amparándose en la exageración (usted me enseñó que toda exageración encierra un gran vacío), se pretende que no sean sólo tres meses de silencio, sino siempre.
Hay ocasiones en las que el tiempo se esfuerza en lavar las ausencias, profesor, pero el desconsuelo también proviene de que vivimos días llenos de aristas. Por eso, hoy, añoro sus enseñanzas, su compañía, su concepción del mundo y, junto a todo ello, el futuro que creímos estar construyendo.
Nos equivocamos, don Enrique. Tal vez algún día cambien las cosas y podamos celebrar el renacimiento de un mundo de ideas nobles. Hasta entonces yo seguiré de pie, oponiéndome y resistiendo, mientras pueda, como lo haría usted. Aunque dicen que es una batalla perdida, y puede que tengan razón; pero es preciso seguir. Por eso, 25 años después de su muerte, le reitero mi deseo de perseverar en su magisterio, despidiéndome con el lema que todos coreamos en su multitudinario adiós: «Hasta siempre, profesor».

jueves, 20 de enero de 2011

Álvaro Cunqueiro

La Voz de Galicia - 20/01(2011




Las Xornadas Cunqueirianas mezclarán música, literatura y gastronomía, en memoria del ilustre escritor y periodista mindoniense, por iniciativa de varias asociaciones culturales y el Concello de Mondoñedo. Los responsables de la organización presentaron ayer la jornada empresarial y musical que se celebrará el día 12 de febrero, en homenaje a Suso Fernández, cronista oficial de Foz, y las actividades complementarias, programadas para los días 11, 12 y 13, en conmemoración del centenario del nacimiento de Álvaro Cunqueiro.
Los actos de homenaje al «mindoniense máis universal» comenzarán el día 11, con una exposición fotobiográfica y una charla sobre Cunqueiro y la gastronomía, a cargo del periodista Xulio Xiz, seguida de una audición de poemas musicados. Del 11 al 13 se desarrollarán las jornadas da Cociña Cunqueiriana, en los restaurantes y cafeterías de Mondoñedo. Los hoteles y casas rurales ofrecerán descuentos especiales a quienes se alojen durante ese fin de semana.
Las Xornadas Cunqueirianas incluyen, además, una ruta por los lugares más significativos de Mondoñedo, en relación con Cunqueiro. Será el día 13, con salida a las 12.00 horas de la oficina de turismo y estará guiada por Xosé Ruiz, Rubén Leivas, Jesús Chao y Francisco Piñeiro.
Homenaje a Suso do Bahía

La jornada empresarial y musical impulsada en homenaje a Suso Fernández,Suso do Bahía, tendrá lugar el día 11, en el auditorio Pascual Veiga. El presidente de la Diputación de Lugo, José Ramón Gómez Besteiro, inaugurará el acto, presentado por Elías Rodríguez Varela. Francisco Cal Pardo analizará el mundo empresarial mariñano y habrá actuaciones musicales, además de la intervención del homenajeado.

viernes, 14 de enero de 2011

Javier Marías

MADRID, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -


   El escritor y académico Javier Marías ha sido galardonado en Italia el Premio Nonino de Literatura en su 36ª edición. El jurado ha destacado que muy pocos autores como él pueden narrar la existencia individual en sus pasiones y ambigüedades y el tejido social e histórico en el que se mueven. "Tras leer sus libros miramos nuestra vida de una manera diferente, más madura y pausada al mismo tiempo", apunta.
   El jurado, presidido por el Premio Nobel V. S. Naipaul e integrado por Adonis, John Banville, Ulderico Bernardi, Peter Brook, Luca Cendali, Antonio R. Damasio, Emanuel Le Roy Ladurie, James Lovelock, Claudio Magris, Norman Manea, Morando Morandini, Edgar Morin y Ermanno Olmi, considera que Javier Marías es uno de los más grandes escritores de nuestro tiempo, que ha revolucionado el sentido del tiempo narrativo. La entrega de este galardón tendrá lugar el próximo 29 de enero en Italia de la mano de Claudio Magris.
   Javier Marías nació en Madrid en 1951 y es autor de numerosos libros entre ellos 'Corazón tan blanco', 'Mañana en la batalla piensa en mí', 'Negra espalda del tiempo' y la trilogía 'Tu rostro mañana'.   Asimismo, es autor de los relatos 'Mientras ellas duermen', 'Cuando fui mortal' y 'Mala índole'; de diversas colecciones de artículos, semblanzas y antologías. En 1997 recibió el Premio Nelly Sachs, en Dortmund; el Premio Comunidad de Madrid en 1998; y en 2000, el Premio Grinzane Cavour, en Turín, y el Premio Alberto Moravia, en Roma, todos ellos por el conjunto de su obra.
   Entre sus traducciones cabe destacar 'Tristram Shandy' (Premio Nacional de Traducción 1979). Fue profesor en la Universidad de Oxford, y en la Complutense de Madrid. Sus obras se han traducido a treinta y dos lenguas y se han publicado en cuarenta y cuatro países, con más de cinco millones y medio de ejemplares vendidos en todo el mundo.

miércoles, 12 de enero de 2011

Valle Inclán

Diario de Sevilla - 12/01/2011



Narrativa completa. Ramón María del Valle-Inclán. Espasa. Madrid, 2010. 1.996 páginas. 60 euros.

Se reúne aquí la obra narrativa de Valle-Inclán, desde aquel Femeninas del año 94 a los tres primeros tomos de El Ruedo Ibérico. No se incluyen, pues, las partes incompletas de aquel proyecto (Fin de un revolucionario y El trueno dorado) y tampoco los diferentes géneros: dramático, lírico y periodístico, en los que descolló resueltamente el gallego. Por otra parte, acompañan esta edición las páginas iniciales de Darío Villanueva; páginas donde a la limpia exposición del académico, viene a sumársele un excelente análisis, ayuno de casticismos, sobre uno de los mayores escritores españoles, si no el mayor, del siglo pasado.

La grandeza de Valle, pues, no ha radicado nunca en su españolidad, en aquello que se dio en llamar "el macizo de la raza" y el dolorido sentir noventayochista. Grandes fueron, sin duda, Azorín, Baroja, Unamuno, Antonio Machado, acogidos al sombrío discurrir de Ganivet y la maraña krausista. No obstante, y pasada la hora bradominesca, de indudable altura literaria, el genio de Valle-Inclán traerá, no sólo una nueva forma de humor, sino una nueva perspectiva, un tiempo nuevo, un singular protagonista a sus novelas. Este protagonista será la ciudad, serán las masas ("En un Madrid absurdo, brillante y hambriento" se apagan sus Luces de bohemia); y este humor novedoso, nacido de los espejos del Callejón del Gato, será el esperpento. Si Cervantes abre irónicamente el Barroco, si Quevedo acuchilla su siglo con el sarcasmo, Valle-Inclán desfigura el XX para darlo a la luz más verídica y más honda, en síntesis pictórica, de la caricatura. Esa misma luz es la que Goya había utilizado, el color como una forma de expresión, en sus pinturas negras. Sin embargo, Valle-Inclán añadirá a este desprestigio, a esta ulceración del retrato, una humillación postrera. El viejo héroe romántico de sus primeras prosas, aquellos cabecillas carlistas de mirada aquilina, son ahora turba indiferenciada en el Madrid borbónico de la Reina castiza. A lo cual se añade la introducción de un tiempo simultáneo, de muy breve trayecto, que lo separa para siempre de las grandes novelas del XIX, donde el tiempo se cuenta por años, quizá por siglos, pero no por horas.

Como recuerda Villanueva en su prólogo, la obra de Valle-Inclán corre pareja a los hallazgos estilísticos de Europa y Norteamérica. No se trata, en ningún caso, de un fenómeno de emulación, sino de la formulación conjunta de diversos problemas que afectarán radicalmente a la literatura. En la obra de Proust, de Joyce, de Mann, de John Dos Passos, encontramos las mismas innovaciones que fundamentan la novela y el teatro del gallego. Así, el tiempo, la coralidad, el influjo del cine, los grandes movimientos políticos, remiten, no al regeneracionismo del 98, sino a la onda mayor del siglo, cuyo caracter masivo, impersonal, caótico, se hará evidente con la guerra del 14. Quiero significar con esto que La media noche de Valle-Inclán no es sólo una novela -otra más- sobre la Gran Guerra; es, en primer término, una obra deslumbrante donde los hombres, reducidos a lejanos corpúsculos que se agitan y mueren en las trincheras, ceden su protagonismo a la coreografía nocturna del frente francés. De igual modo, en El Ruedo Ibérico, será la innúmera titilación de sus personajes, convertidos en afiches, quien a la vuelta nos dé la verídica faz de un país en ruinas.

Quizá, como en ningún otro autor español del siglo XX, en Valle-Inclán se reúne el círculo completo que va del malditismo fin de siècle a la vanguardia expresionista de los años 20. Del cinismo galante de sus Sonatas, deudor del Aretino y Casanova, del bronco legitimismo de su Trilogía carlista, a su Tirano Banderas, media apenas una década. Sin embargo, en su trayecto han caído el heroísmo individual, la épica decimonónica, el arpa modernista, para dar paso al argot y el estrépito de las calles. Sin duda, Valle viene de Chateaubriand, de Barbey, del caballero Seingalt, de la flor y la melancolía rubendarianas. Pero Valle, principalmente, viene del genuino sobreponerse, de la ancha superación de sus modelos. Cuando en la víspera de Reyes del 36, hace ahora 75 años, Valle-Inclán muera de cáncer, se habrá cumplido aquello que escribió en su Sonata de Otoño: "¡Ante esa duda lloré! ¡Lloré como un dios antiguo al extinguirse su culto!". Rey unigénito, Valle-Inclán es ese ídolo, pálido e indescifrable, que aún hoy nos asombra.

domingo, 9 de enero de 2011

Umberto Eco, Vargas Llosa, Millás

Barcelona. (EUROPA PRESS). - El Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa por su último libro 'El sueño celta', Juan José Millás con 'Lo que sé de los hombrecitos' y Umberto Ecopor 'El cementerio de Praga' son algunos de los candidatos a recibir los premios internacionalesTerenci Moix 2011 de literatura, cinematografía y artes escénicas en su séptima edición.


Además de Millás, Eco y Vargas Llosa --encargado en la pasada edición de entregar uno de los galardones a Javier Cercas--, destacan entre los candidatos en la categoría de ficción el escritor sueco Henning Mankell ('Tea-Bag'), Almudena Grandes ('Inés y la alegría') y Elvira Lindo ('Lo que me queda por vivir'), aunque el listado todavía no está cerrado.


Los premios Terenci Moix se reparten en aquellas disciplinas artísticas más relacionadas con el homenajeado, con lo que además de las tres categorías literarias --ficción, crónica y ensayo--, hay un premio específico de una de sus grandes pasiones: el cine.


Para este galardón se barajan importantes nombres de la escena internacional como Tim Burton ('Alicia en el País de las Maravillas'), Clint Eastswood ('Invictus') y Álex de la Iglesia ('Balada triste de trompeta'), entre otros. La entrega de premios cambiará en esta edición de fecha y de lugar, celebrándose el 22 de septiembre en el Palau de la Mùsica de Barcelona, coincidiendo con las fiestas de La Mercè, en lugar de hacerse en el Liceu el día de Sant Jordi (23 de abril) como hasta ahora era habitual, según ha explicado este miércoles en rueda de prensa Ana María Moix, escritora presidenta del jurado y hermana del escritor.


La rueda de prensa ha contado con el nuevo conseller de Cultura, Ferran Mascarell, quien ha calificado los premios de entrañables, y se ha congratulado de que se hayan convertido "en una referencia", siendo de los menos dotados económicamente pero de los más significativos.


El jurado que falla los galardones --formado por más de 30 personalidades del mundo de la cultura-- incorpora como novedad a la escritora Ana María Matute, y pierde al también escritor José Saramago, tras su muerte en junio de 2010, y que la última vez que visitó Barcelona para un acto público fue precisamente para asistir a la pasada edición de los premios Terenci Moix, según ha precisado la organización.

viernes, 7 de enero de 2011

Premio Nadal - Alicia Jiménez Bartlett

El Confidencial -7/01/2011



La escritora albaceteña afincada en Barcelona Alicia Giménez Bartlett ha ganado el Premio Nadal, dotado con 18.000 euros, con su novela Donde nadie te encuentre inspirada en el personaje real de Teresa Plà Meseguer, una maquis conocida como "La Pastora" o "Florencio".

Giménez Bartlett, considerada la dama española del crimen gracias a su serie de la inspectora Petra Delicado, ha escrito una novela basada en Teresa Plà Meseguer, nacida en 1917 en el mas de la Pallissa, una casa de pastores de Vallibona, cerca de Morella.

La novelista explora las posibilidades caleidoscópicas del personaje, que nació con una malformación, lo que dificultó la identificación del sexo en un primer momento, aunque finalmente fue registrada como niña (Teresa).

La leyenda que rodea al personaje cuenta que tras sufrir una humillación por parte de unos agentes de la Guardia Civil, Teresa Plà, que luego también sería conocida como Durruti, se unió al maquis, seguramente más por venganza que por convicción ideológica.




Antes de su detención en 1960 en Andorra, La Pastora, ya convertida en hombre (Fulgencio) compaginaba las tareas de pastoreo con el contrabando de tabaco y nylon.




Fue el diario de sucesos El Caso el que hizo circular la leyenda negra de La Pastora hasta el punto de que tras su detención fue acusada del asesinato de 21 guardias civiles y 7 alcaldes.
Tras ser liberada por la amnistía política de 1977, Fulgencio se instaló en Castellón junto a una sobrina, hasta que en 2002 volvió a su población natal para solicitar un certificado del Ayuntamiento que le permitiera recibir una indemnización como represaliado del franquismo.




Aprovechando la búsqueda que los dos protagonistas, un psiquiatra francés y un periodista catalán, realizan de Teresa Plà, Giménez Bartlett realizar un retrato de la España de la posguerra en "Donde nadie te encuentre".




Tras el fallo del jurado, la escritora de novela negra ha confesado que el tema de Teresa Plà Meseguer le apasionaba desde hacía mucho tiempo, porque circulaba la historia de que esta bandolera, adscrita al maquis, era "sanguinaria", acusada formalmente de 29 asesinatos y que se escondía en la zona del Maestrazgo y Els Ports, una zona que la propia Giménez Bartlett conoce bien.




El escenario en el que discurre la trama es "esa España terrible de los años 50" y lo que más le atrajo del planteamiento narrativo era poder escribir sobre "un personaje real que vivió entre nosotros hasta el año 2004".


Un tema casi tabú

Ya hace unos años, Giménez Bartlett quiso empezar a escribir sobre esa mujer misteriosa, de la que "no se sabía si era mujer u hombre" y con ese objetivo envió a un documentalista a la zona para investigar sobre el tema. "Lo más sorprendente -ha dicho- es que no hay apenas datos en los archivos y que los que conocieron a esa mujer no hablan, como si hubiera una especie de 'omertá'".


Los intentos infructuosos por novelar la vida de Teresa Pla se despejaron cuando Giménez Bartlett se topó con "un libro valioso", publicado en una editorial de Vinaroz y escrito por José Calvo, quien "sin buscar una teoría ni hacer un ensayo exhaustivo publicó casi 1.000 páginas", un libro y un autor "sin el que no habría podido hacer esta novela".

A partir del material proporcionado por José Calvo Giménez Bartlett se metió de lleno y "con una pasión encendida" en la escritura de la historia, que le llevó todo un año, algo poco usual en la escritura de sus novelas, ha reconocido la escritora manchega.

Al final de su intervención ha querido dedicar el premio a "una joven promesa", Ana María Matute: "Va por ti, bellezón".
En la misma velada, que cada Día de Reyes abre el curso literario en España, el periodista del diario en catalán Ara Cristian Segura ha recibido el Premio Josep Pla de prosa en catalán por su primera novela "El cau del conill", en la que retrata la decadencia de una familia burguesa barcelonesa actual en plena época de la globalización.

lunes, 3 de enero de 2011

Premio de Novela Corta Diputación de Córdoba

Esteban Martín Morales, ganador del XI Premio de Novela Corta Diputación de Córdoba

Esteban Martín Morales, natural de Tortosa (Tarragona), es licenciado en Antropología por la Facultad de Geografía e Historia de Barcelona. En su trayectoria destaca la dirección literaria que desempeñó durante diez años en una importante editorial de Barcelona. En 2001 fundó su propia editorial con el nombre Litera Books, dedicada a la narrativa y al ensayo.

Además, Ha colaborado en periódicos y revistas de divulgación histórica y en programas culturales de radio. Entre sus obras destaca la publicación de Federica Montseny, Ricardo y su robot, La clave Gaudí –traducida a más de 20 idiomas-, o El pintor de sombras.

El jurado encargado de seleccionar la obra ganadora del XI Premio de Novela Corta Diputación de Córdoba estuvo compuesto por Joaquín Pérez Azaústre, Miguel Ranchal Sánchez, Ascensión Sánchez Fernández y María José Porro Herrera. El secretario fue Antonio Ávila Martín.